sábado, 16 de febrero de 2013

Como cada uno defiende sus intereses
Gracias a los comentarios en un blog (1) encuentro lo siguiente. El 11 de Diciembre de 2012, el diario inglés The Independent publicaba un artículo David Cameron: 'Britain must be at the heart of shale gas revolution' con un título ya bastante significativo de su contenido defendiendo el shale gas (2).
Con anterioridad (9 de Diciembre de 2012) el alcalde Londres Boris Jhonson se manifestaba de forma más categórica en defensa de dicho gas: Ignore the doom merchants, Britain should get fracking. It's green, it's cheap and it's plentiful! (3). Propone no hacer caso a lo que denomina mercaderes de la tragedia, que el Reino Unido debe conseguir el fracking, que verde, que es barato y que es abundante y no entendiende el porqué de tanto alboroto de los que se oponen al gas de esquisto.
Comienza así de categórico: If it were not so serious there would be something ludicrous about the reaction of the green lobby to the discovery of big shale gas reserves in this country. Posteriormente toca muchos temas importantes: la recesión del país, los problemas de los pensionistas, que les daría seguridad de abastecimiento energético, habla de los importantes costes del tratamiento de los residuos radiactivos en las centrales nucleares, la poca contribución de la energía eólica, que dependeremos del gas ruso (dice de Putin) ó de la potencia nuclear francesa, de que los costes del gas en US han bajado de forma importante y del desarrollo por tanto de la industria química, etc
Obviamente como defiende lo suyo, cuando habla del carbón pone como excusa el Protocolo de Kioto para no inclinarse por el mismo como generador de energía eléctrica. Sinó tuvieran las importantes reservas de shale gas ó del petróleo del Mar del Norte “otro gallo cantaría”.
Quiero destacar en el artículo los siguientes párrafos y en particular lo subrayado:
In their mad denunciations of fracking, the Greens and the eco-warriors betray the mindset of people who cannot bear a piece of unadulterated good news. Beware this new technology, they wail. Do not tamper with the corsets of Gaia! Don’t probe her loamy undergarments with so much as a finger — or else the goddess of the earth will erupt with seismic revenge. Dig out this shale gas, they warn, and our water will be poisoned and our children will be stunted and our cattle will be victims of terrible intestinal explosions. Yesterday the Observer found some political support for the gloomsters, in the form of a German MEP. His name is Jo Leinan, and it seems he is a prominent member of the Euro-parliament’s energy committee. There were only two countries interested in this procedure, he said – Poland and Britain.
And according to Herr Leinan, neither of us knows what we are getting ourselves into. We are about to release the pent-up shale gas of Britain from its sinister cavities beneath Lancashire and Sussex, and anything can happen. Before we touch the integuments of the planet, he says, the European parliament will produce some regulations to “discipline” the operation.
Regulations? From the Euro-parliament? And these people wonder why we in Britain are increasingly determined to have a referendum on our membership of the EU. I am sure that the SPD politician means well, but just what in the name of hell has it got to do with him? Before he draws up any regulations for the British fracking market, he might care to look at what has been going on in America in the past four years, where the discovery of large quantities of shale gas is turning into one of the most significant political events since the end of the Cold War.
Cuando un eurodiputado alemán habla de regular el fracking (otro que defiende lo suyo “regulando” con el apoyo de la maquinaria alemana en Europa), defienden sus planteamientos hasta las últimas consecuencias:…incluso dice que no es de extrañar que muchos ingleses se planteen un referéndum sobre la permanencia en la UE…
Parecido a España que después de haber hecho dejación de todo en el caso del carbón (por parte no solo de políticos -no todos pero bastantes- sino también y muchas veces peor, de funcionarios europeos de todos los niveles que eran más “papistas que el papa”), andamos ahora mendigando y buscando resquicios legales para que nos dejen eso si “por favor” algo de carbón autóctono como reserva estratégica. Vale esto último, pero que quede claro lo anterior.
Ya hablaremos en otro momento algo de las técnicas de aprovechamiento, del metano que genera su extracción, del denominado grado de recuperación, de la sismicidad inducida y como se puede minimizar, de la posible repercusión en el paro, etc.