De los
siglos XII a XVII el arenque fue una fuente importantísima de alimento en
Europa y por tanto también eran vitales las grandes pesquerías del Báltico, del
mar del Norte y del canal de la Mancha entre otras. Para la comercialización
del arenque era esencial su conservación de ahí lo imprescindible de la sal y
su carácter estratégico. La sal fue denominada el “oro blanco”.
La
Antigua ruta de la sal (Alte Salzstraße) discurre por unos 100 km, desde
Luneburgo (Lüneburg) la ciudad de la sal con más de 1000
años de antigüedad hasta la ciudad hanseática de Lubeca, la puerta al mar
Báltico. La sal procedía de los manantiales salitrosos de Lüneburg y de las
minas salinas del Sur a través de una infraestructura de canales. Los caminos de la sal posibilitaron el desarrollo de grandes potencias tales como las ciudades hanseáticas del Norte de Alemania y Venecía.
Me he
encontrado en la figura que sigue que corresponde al museo de la sal con la
conocida expresión minera Glückauf. Glückauf es el tradicional
saludo de mineros alemanes. En él se describe la esperanza de los mineros :
"es mögen sich Erzgänge auftun" ("puede vetas [de mineral] ser
abierto"), que es la abreviatura de "Ich Wunsche Dir Glück, tu einen
neuen cuadrilla auf" ("Le deseo suerte en la apertura de una nueva
veta "), ya que, cuando la minería de mineral, sin la prospección, nadie
podía predecir con certeza si el trabajo de los mineros llevaría a una
recompensa. El saludo
también expresa el deseo de que los mineros vuelvan con seguridad de la mina
después de su turno. Así he pasado mucho tiempo saludando en las minas alemanas de "oro negro". Viejos, importantes y agradables recuerdos.
Todo el rollo viene a cuento por un estupendo libro que acabo de leer titulado "La sal de la tierra" de Daniel Wolf editado por Grijalbo y que recomiendo a los aficionados a la buena y documentada novela histórica.
Todo el rollo viene a cuento por un estupendo libro que acabo de leer titulado "La sal de la tierra" de Daniel Wolf editado por Grijalbo y que recomiendo a los aficionados a la buena y documentada novela histórica.